Rutina para mantenernos jóvenes y hermosas:


Lunes: limpieza de cutis
Empezar la semana con energía y pensamientos positivos es el primer paso para verse y sentirse mas joven.Con respecto a los tratamientos, lo ideal es comenzar purificando y eliminando la suciedad de la piel.Luego de la ducha matinal, ponte cómoda y prepara una crema casera para eliminar la suciedad de los poros, para ello:
Tritura 4 frutas bien maduras y cuélalas para obtener el jugo.
Colócalo en un recipiente y agrégale 2 gotas de aceite esencial de menta.
Revuelve bien y aplica sobre la piel con masajes durante un minuto, evitando siempre la zona de los ojos.
Enjuaga con agua tibia y luego aplica agua fría.
Recuerda que siempre debes aplicar las mascarillas sobre la piel limpia y tonificada, con la ayuda de un pincel de brocha gorda o espátula de plástico.

Martes: cuerpo más firme y tonificado
Peeling mecánico o casero para mantener un rostro joven.
Mezcla 1 cucharadita de microgránulos homogéneos con 1 cucharadita de crema humectante (cualquiera que tengas en casa)
Masajea el rostro durante 3 minutos y retira con abundante agua.
Otro consejo casero: una 1 cucharadita de azúcar muy fina, junto a 5 gotas de limón y 1 cucharadita de yogur.Utiliza desde el cuello hasta los tobillos con la ayuda de una esponja vegetal por medio de masajes enérgicos.

Miércoles: humectación del rostro
El cutis se ve algo opaco después del invierno. Devolverle algo de su lozanía y frescura es tu meta inmediata. La incomparable ayuda natural de las frutas, unida a distintos ingredientes, contribuirán a encontrar la tersura perdida.
Máscara revitalizante: pela 5 uvas y presiónalas sobre un colador, coloca el zumo obtenido en un recipiente y ves agregando la arcilla hasta hacer un pasta. Esparce esta preparación sobre la cara evitando tocar los ojos y los labios.Después de 10 minutos, retírala con agua fresca.
Bananas salvadoras: pela y tritura 1/2 k de bananas con 1/2 taza de sal fina. Mezcla bien y frota tu piel con la crema antes de ducharte. Luego enjuágate. Su piel quedará fresca y suave.

Jueves: pelo hidratado
Un corte de puntas, barros caseros junto a un buen masaje capilar serán las claves para que tu melena arranque suspiros.Antes de poner manos a la obra recuerda que si el estado de tu cabello es muy reseco, lo que deberás hacer en principio es recortarte las puntas.Este sencillo paso facilitará el resultado de cualquier baño capilar.
Coloca en un recipiente a baño María 2 cucharadas de aceite vegetal, 1 huevo y 1 cucharadita de miel.
Mezcla muy bien esta preparación y caliéntala lentamente.
Con la loción que obtengas, masajea el cuero cabelludo y el largo del pelo.
Una vez que esté bien distribuido cubre tu cabeza con una gorra.
Aplica calor con la ayuda del secador, durante 20 ó 30 minutos y luego lava con un champú suave.
Enjuaga a fondo con abundante agua tibia a caliente y por último..., sumerge la cabellera en un abundante chorro de agua fría.

Viernes: pies más suaves
Pocas personas tienen la constancia de asistir al pedicuro regularmente.Para empezar, en casa y con un poco de paciencia, puedes cuidar ti misma esta olvidada parte del cuerpo.
Remoja tus pies en un recipiente con agua tibia y unas gotas de esencia de caléndula.
Pasa la piedra pómez por las plantas de los pies, talones y por cualquier zona en donde se hayan formado durezas.
Con un palillo de naranjo empuja las cutículas con los pies aún húmedos.
Enjuágalos bien y luego seca con una toalla.
Pasa una lima de cartón y dale forma a las uñas: ni demasiado redondas ni ovaladas, lo ideal es que tiendan a mantenerse cuadradas.
Finalmente utiliza sólo brillo.
No es conveniente que apliques bases de calcio ya que endurecerán demasiado las uñas.

Sábado: tersura garantizada para las manos
Para recuperar la suavidad de sus manos, deterioradas luego del uso de detergentes y trabajo de la casa, sigue estos pasos:
Como primer paso, lava tus manos con un jabón suave, neutro o de glicerina.
Sécalas bien con una toalla de algodón.
Pasa una lima en forma delicada por el borde de las uñas y dales una forma levemente cuadrada.
Límpialas en manchadas frótalas con jugo de limón, enjuágalas con agua tibia y vuélvelas a secar. Después, coloca un poco de aceite de almendras o, en su defecto, unas gotas de aceite de oliva en sus uñas y manos.
Luego, para profundizar el tratamiento, agrégale una dosis de crema humectante y luego cúbrelas con una capa de film. Si deseas optimizar el resultado, coloca sobre éste otro de algodón.
Deja actuar sólo cinco minutos para poder dar, luego, las más suaves caricias.

Domingo: baño refrescante y energizante
Un baño de inmersión con sales o espuma es el momento ideal para desconectar y recuperar la paz y tranquilidad.
Llena la bañera con el agua bastante caliente (debes probarla con el codo)
Sumérgete lentamente.
Luego de algunos minutos, y una vez que sus músculos se hayan relajado, estira la pierna derecha, dóblala de inmediato y vuelva a la posición inicial.
Repite con la izquierda y realiza 10 ó 15 movimientos con cada miembro.
Levanta la pierna derecha y llévala hasta donde tu cuerpo lo permita. Vuelve a la postura inicial y repite con la otra pierna.
Por último, recuéstate y relaja todo el cuerpo, desde la cabeza hasta los pies.
Cuando hayas terminado el tiempo de reposo, al salir de la ducha aplícate una generosa dosis de crema hidratante.

Marina Ruiz