¿Cuántas veces durante nuestra vida hemos experimentado ese hermoso sentimiento de estar enamoradas? Conocemos a alguien y nos sentimos fuertemente atraídas por ese alguien, nuestro estado emocional es de alegría, pensamos en las cualidades de esa persona y hasta llegamos a idealizar a esa persona… ¿es amor o enamoramiento?
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Nos enamoramos por diversos motivos, pero especialmente porque pensamos o sentimos que esa persona es encantadora y nos atrae muchísimo, tanto que muchas veces nos sentimos confundidas preguntándonos porqué nos sentimos tan atraídas a él, incluso cuando apenas nada sabemos acerca de él. Nuestra mente siempre está divagando con él y nos pasamos todo el día pensando en ese maravilloso ser que nos ha cautivado… Tenemos un irresistible deseo por estar con él, de saber de su vida, de acercarnos más y madurar la relación y ese amor que sentimos, queriendo convertirlo en ese amor sólido con que todo humano sueña…

Cuando estamos enamoradas tendemos a pensar que este es el amor definitivo, el que se ha estado esperando toda la vida, ese amor que será para siempre… Pero es necesario pensar en esos momentos que el enamoramiento es sólo el inicio que eventualmente podría terminar en verdadero amor o podría también ser un enamoramiento no correspondido y hundir a una de las dos partes en un estado de tristeza que tendrá que ser superado.

La necesidad de amar y ser amadas algunas veces nos impide diferenciar el verdadero amor del enamoramiento, muchas veces haciéndonos ignorar algunas de las señales u obstáculos que impiden llevarnos a una relación, puede ser la existencia de alguien más, que esté casado o el rechazo mismo de la persona que se pretendió conquistar. Debemos mantener presente que a lo largo de nuestro camino encontramos personas inseguras que engañan a otras personas para conseguir sus propósitos, fingen cualidades que no tienen y ocultan muy bien sus limitaciones, y aunque las reconozcan no las dicen, hasta que la otra persona las percibe y empiezan las decepciones al sentir el engaño.

Muchas relaciones fracasan porque la persona engañada busca como enamorarse de nuevo, tratando de olvidar lo que le hizo sufrir, y aunque se sientan cómodos con la nueva relación no están enamorados, esto hace que una persona experimente muchas relaciones fallidas, y le haga pensar que todos hombres son iguales.

Se debe tomar muy en cuenta que debemos tomar precauciones, estar conscientes que el amor y el enamoramiento son dos cosas muy diferentes, que si bien es cierto el enamoramiento se puede convertir en amor verdadero y duradero, puede suceder también que una de las partes esté enamorado falsamente, que podría incluso ser que se sienta atraído por lo que la otra persona tiene o de lo que representa socialmente o económicamente. El amor verdadero existe, las ilusiones y los sueños los tenemos, no podemos ni debemos renunciar a ese hermoso sentimiento, porque el echo de haber sufrido algunas decepciones no significa que debemos negarnos a ese sentimiento tan sublime como lo es el amor.

Mantengamos la ilusión y el entusiasmo por la vida y el amor, cuidemos nuestro corazón de la confusión del enamoramiento y del amor verdadero. Debemos tener la mente abierta, prepararnos y estar dispuestas a sobreponernos cuando nos sentimos enamoradas, pensando siempre que es un sentimiento que podemos confundir con amor, o sencillamente no ser correspondidas por la otra parte. Debemos mantenernos altivas y alejarnos valientemente de una relación que no pasará de la euforia del enamoramiento.


Con el cariño y respeto de siempre:
Amanecer cautiva del amor.

Toda Mujer es Bella

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